Los precios de los agroalimentos se multiplicaron 3,4 veces del campo a la góndola y la demanda cayó cerca de un 35% durante septiembre.
Así lo indica el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
De esta manera, el consumidor pagó $3,4 por cada $1 que recibió el productor en el noveno mes del año.
En tanto que la participación del productor explicó, en promedio, el 24,7% de los precios de venta final, un 20,1% menos con respecto al mes anterior.
El retroceso de la participación del productor en los valores definitivos de los agroalimentos se viene acentuando en los últimos meses.
Al respecto, desde CAME explicaron que “este mes se incrementaron los niveles de producción y, como consecuencia, se observó una disminución significativa en los precios de varios productos de la canasta IPOD, lo que explicó el descenso en la participación del productor”.
En este contexto, detectaron que “durante el mes de septiembre, fruto de la falta de convalidación de precios por parte del consumidor, se observó una caída de demanda de alrededor del 35%”.
Así, la situación forzó a distintos eslabones de la cadena de valor (mayoristas y minoristas) a resignar parte de la renta